miércoles, 28 de enero de 2009

Gracias a la vida que me ha dado tanto

Llueve, detrás de los cristales llueve y llueve. Enero ha sido duro con España: inundaciones, vientos, víctimas...incluso niños. La lluvia limpia pero esta vez ha dejado desolación y muerte. Pero hay que dar gracias a la vida por habernos dado lluvia para que no nos falte el agua. Necesitamos agua para beber, para lavarnos, para vivir. Gracias a la vida que nos ha dado tanto, aunque a muchos les haya quitado demasiadas cosas. ¿Hemos pagado un precio demasiado alto por esta lluvia? El viento, que todo lo arrastra, también era bueno para llevarse todos los malos pensamientos, los malos sentimientos... Pero se ha llevado la vida de niños inocentes, de personas inocentes por delante. Demos gracias a la vida que nos ha dado tanto pero pensemos en el precio que hemos tenido que pagar por esta lluvia y este viento.